Casi 20 organizaciones de la sociedad civil expresaron su preocupación por la complicada situación de quienes defienden derechos humanos de las mujeres, la paz, el medio ambiente y la tierra, ante el embajador de Noruega en Colombia, John Petter Opdahl y el Fondo Noruego para los Derechos Humanos.
Las y los participantes explicaron la inseguridad que sienten en sus regiones lo que complica su labor de defensa de derechos humanos. Camilo López, coordinador de proyecto de la Fundación Estrella Orográfica del Macizo Colombiano (FUNDECIMA), comentó: “Aunque los homicidios descendieron a causa de las restricciones relacionadas por el coronavirus, las masacres aumentaron y aparecieron más organizaciones criminales poniendo en riesgo los avances de los Acuerdos de Paz”. Asimismo, Dayana Blanco, directora general de ILEX Acción Jurídica, evidenció la situación de las comunidades indígenas y comunidades negras de diferentes etnias, al subrayar que hay una necesidad de tener en cuenta “el enfoque étnico racial de las medidas de protección”. Y lamentó el “sub-registro que hay en cifras de las personas defensoras, líderes y lideresas sociales indígenas y afro-LGTB asesinados y amenazados”.
Para las organizaciones es importante mantener la cooperación con las otras organizaciones así como contar con un espacio de coordinación para hacer seguimiento a la situación y establecer reuniones sobre temas específicos que requieran atención por parte de la comunidad internacional. Germán Romero, abogado de dhColombia, compartió la necesidad de “dar seguimiento a las medidas de protección de líderes y acompañar la concertación de medidas colectivas para comunidades afrodescendientes e indígenas”. Por su parte, María A. Palacio, gerente de la Corporación Sisma Mujer, apuntó algunas preocupaciones sobre los derechos de las mujeres agravados con la aparición de la pandemia. “Hubo una agudización en la estigmatización durante 2020 y aumentó la carga de cuidados para las mujeres”, señaló. Ante esto, Palacio recomendó que se apoyen “medidas de género concretas como parte de la agenda principal”.
“Hubo una agudización en la estigmatización durante 2020 y aumentó la carga de cuidados para las mujeres” María A. Palacio, gerente de la Corporación Sisma Mujer.
El Embajador de Noruega en Colombia, John Petter Opdahl, se manifestó muy comprometido con el trabajo que hace la sociedad civil y se mostró “muy alineado” con sus recomendaciones. “Estamos acá para ustedes y estamos convencidos de que van a jugar un papel importante para ayudar a conseguir una paz sostenible y duradera”, añadió. Además, la directora país de FNDH Colombia, Caroline Aarsaether, subrayó la importancia de estos encuentros: “Valoramos tener este espacio con la Embajada para lograr visibilizar la gran valentía de las organizaciones de la sociedad civil colombiana que seguiremos apoyando para ayudar a promover sus causas a nivel internacional”.
Valoramos tener este espacio con la Embajada para lograr visibilizar la gran valentía de las organizaciones de la sociedad civil colombiana que seguiremos apoyando para ayudar a promover sus causas a nivel internacional “Directora país de FNDH Colombia, Caroline Aarsaether”
Este espacio fue posible gracias al acuerdo de colaboración firmado entre la Embajada de Noruega en Colombia y el Fondo Noruego para los Derechos Humanos (FNDH) por el cual este último apoya alrededor de 50 proyectos de organizaciones de la sociedad civil colombiana que trabajan en temas de acceso a la justicia y paz; seguridad, protección y garantías de personas defensoras de derechos humanos y derechos medioambientales y de la tierra.
Foto: Reunión con comunidades en Putumayo, coordinado por la Comisión Intereclesial de Justicia y Paz (CIJP) durante el 2020. Crédito: CIJP