El río San Juan es el más importante de la vertiente del pacífico colombiano y el más caudaloso de la misma en Suramérica. Nace en el noroccidente del país y se extiende hacia el noroeste, hasta su desembocadura en el mar.
En las aguas de este inmenso río se realizan diversas actividades económicas que han mantenido la subsistencia de las personas en los territorios, como el comercio fluvial, la pesca, los cultivos y la extracción minera.
El San Juan de Colombia ha sido clave para el sustento y desarrollo de sus habitantes pero sus afluentes también han arrastrado el “conflicto social, político y armado, que entre otras, ha militarizado los territorios por parte de la Fuerza Pública, grupos paramilitares y la insurgencia”, argumentan las 34 organizaciones de los territorios en un comunicado de prensa.
Según las organizaciones, esta situación ha provocado el desplazamiento forzado de más de 900 familias afrocolombianas e indígenas y, a su vez, ha incrementado la violencia hacia aquellas personas que trabajan en la defensa de los derechos humanos y el medio ambiente en el Chocó.
Ante esta situación, las organizaciones decidieron embarcarse en un viaje por el río San Juan con destino a Medio San Juan, Itsmina, Sipí, Novita y Condoto, lugares que según las organizaciones han sido fuertemente azotados por el conflicto.
Mediante la ‘Caravana Humanitaria por la Vida y la Permanencia en el Territorio’ “visitamos a casi todas las comunidades y pudimos visibilizar su situación y el abandono estatal en el que viven” dijo Elizabeth Moreno quien hace parte de la caravana por medio del Consejo Comunitario General del San Juan (ACADESAN).
Moreno también explicó que durante los encuentros en los territorios afectados por el conflicto armado pudieron dar seguimiento a la implementación del Acuerdo de Paz y su enfoque hacia las víctimas. “Es muy triste lo que viven las comunidades por eso queremos hemos venido trabajando en el desarrollo de medidas que garanticen la vida de las personas”, expresó.
Como parte de su proyecto, ACADESAN trabaja en el fortalecimiento de los derechos de las personas afrocolombianas que habitan en el río San Juan. La protección de sus territorios y la formación de las comunidades son dos temáticas clave para la organización y con los que buscan salvaguardar a sus habitantes y su entorno natural.
Para lograr esto, algunas de las actividades que ACADESAN ha venido llevando a cabo son el asesoramiento al Consejo Comunitario en el proceso de caracterización de afectaciones territoriales; el diagnóstico a los procesos sociales y jurídicos frente al despojo de 32.000 hectáreas del territorio Sipí; el acompañamiento e interlocución en las audiencias de medidas cautelares con la Unidad de Restitución de Tierras; entre otros.
Desde ACADESAN, Moreno expresa que “el proyecto llegó enhorabuena porque seguimos luchando y visibilizando esta situación. El proyecto nos ha permitido exigir en instancias jurídicas los derechos que tenemos como víctimas”.
Desde el Fondo Noruego para los Derechos Humanos apoyamos a las comunidades del río San Juan, en Colombia, que durante años se han encontrado en medio de este conflicto armado. Aplaudimos la labor de ACADESAN, una organización que se ha caracterizado por dar a conocer esta situación y por defender los derechos de las personas que habitan estos territorios del país.
Crédito de portada: ACADESAN