Las mujeres en Colombia continúan luchando por sus territorios y comunidades sin medidas de protección efectivas para ellas y sus familias. Según cifras de Sisma Mujer, por lo menos 526 lideresas sociales y defensoras de derechos fueron vulneradas entre 2020 y 2021.
Este es el caso de Maydany Salcedo, quien es presidenta de la Asociación Municipal Campesina de Trabajadoras y Trabajadores de Piamonte Cauca (ASIMTRACAMPIC), una organización local que busca mejorar las condiciones de 904 familias campesinas en uno de los lugares de mayor biodiversidad de Colombia y a su vez más golpeados por el recrudecimiento del conflicto armado.
En el Cauca 473.533 personas han sido víctimas del conflicto armado; es decir casi una tercera parte de la población total departamental, dice un informe de la Comisión de la Verdad. Además, datos del Instituto de Estudios para el Desarrollo de la Paz (INDEPAZ) reportan que 299 líderes y lideresas han sido asesinadas desde 2016 en este departamento, 78 eran campesinas y muchas de ellas hacían parte de ASIMTRACAMPIC.
La organización social que lidera Maydany Salcedo está ubicada en Piamonte un municipio de la reconocida Bota Caucana entre los departamentos de Caquetá y Putumayo que se destaca por sus importantes corredores biológicos entre la región andina y el inicio de la Amazonía colombiana.
En una conversación con Maydany Salcedo hablamos sobre las problemáticas que enfrentan en la frontera andino-amazónica y cuáles han sido los obstáculos que la lideresa social y presidenta de ASIMTRACAMPIC ha tenido que sobrepasar.
¿Cuáles son las problemáticas que enfrentan los ecosistemas de la región andino-amazónica de Colombia?
Hace menos de un año las multinacionales dejaron derramar crudo (petróleo) sobre el río Caquetá, lo que provocó la contaminación de los ecosistemas y del agua que bebemos en nuestras fincas. La minería ilegal es otra de las problemáticas que enfrentamos, el cual ha incrementado la contaminación de las aguas debido a los químicos. Desde ASIMTRACAMPIC y otras organizaciones locales hemos venido denunciado estos hechos.
¿Cómo ha sido este proceso de denuncia?
Desde nuestros inicios en ASIMTRACAMPIC (2015) hemos sido estigmatizados por nuestras acciones y nuestra forma de hablar. Hemos sido víctimas de “falsos positivos”, de allanamientos, de persecuciones, de asesinatos.
¿Ha experimentado esta estigmatización de una forma diferenciada?
Sí. Desde el 2014 he sufrido amenazas y desde 2020 me han atacado a mí, a mi familia y a mi pareja. Hemos tenido que salir de nuestros territorios por amenazas de muerte. Este ha sido un proceso muy doloroso, y sé que ser franca frente a las injusticias que veo en mi territorio es lo que me ha llevado a que ande como estoy andando.
¿Cómo ha afectado esta situación la labor de defensa de los derechos humanos y del medio ambiente?
Esto ha afectado a toda la organización a nivel psicológico y emocional. A pesar de todas las circunstancias tan dolorosas que hemos enfrentado, esto no ha hecho que abandonemos el proceso. Al interior de ASIMTRACAMPIC decimos que así nos toque escondernos, no vamos a abandonar este trabajo. La gente se siente identificada y ama a ASIMTRACAMPIC.
A pesar de los obstáculos que han enfrentado en la organización, ¿qué iniciativas desarrollan en pro de las familias y del territorio?
En este momento estamos trabajando en una iniciativa para evitar la deforestación en la región andino-amazónica a través de la promoción de sistemas productivos sostenibles mediante alianzas productivas para productos del bosque, maderables y no maderables y el afianzamiento y mejora de las cadenas productivas de carne, leche, cacao y caucho.
¿Qué pide como lideresa social y presidenta de ASIMTRACAMPIC para seguir la labor?
Pedimos el cese a la persecución, amenaza, y violencia ejercida por diferentes actores contra personas y organizaciones defensoras de derechos humanos y del medio ambiente. Para esto, es necesario un acuerdo humanitario.
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Desde el Fondo Noruego para los Derechos Humanos y ForumCiv reconocemos y apoyamos la labor de la Asociación Municipal Campesina de Trabajadoras y Trabajadores de Piamonte Cauca (ASIMTRACAMPIC) en cabeza de Maydany Salcedo por la defensa de los Derechos Humanos y del medio ambiente en Colombia. Rechazamos las amenazas y violencia contra la sociedad civil y hacemos un llamado a la protección y garantías para la construcción de un país en paz.
Fotografía de portada: FNDH/MarcelaRuiz